Vehículos eléctricos: EGEA se centra en el reto del sector de la automoción

Desde el mes de octubre del año pasado ya es un hecho: ¡a partir de 2035, en la UE solo se matricularán vehículos que no supongan un impacto para el clima! Los Estados miembros de la UE y el Parlamento Europeo han acordado que a partir de esa fecha los fabricantes ya no podrán vender coches nuevos que emitan gases de efecto invernadero. En la actualidad, la Comisión Europea sigue estudiando si debe permitirse el uso de combustibles sintéticos, los llamados e-fuels o electrocombustibles, en los automóviles. Pero tanto si se acerca el final categórico de los vehículos con motor de combustión, como si se mantiene alguna posibilidad de que no sea totalmente así, lo que está claro es que la UE ha marcado el rumbo hacia la electromovilidad:  el futuro está en manos de los vehículos eléctricos.

El cambio a los vehículos eléctricos anuncia una nueva era

Sin embargo, la decisión de la UE plantea muchos interrogantes, y no solo entre los consumidores, por ejemplo en relación con la infraestructura de recarga de los vehículos eléctricos o el rendimiento de la red eléctrica. Por ejemplo, la Asociación Alemana de la Industria del Automóvil (VDA) critica la expansión de la infraestructura de recarga en un artículo de la revista ‘Der Spiegel’ por considerarla demasiado lenta. Pero la decisión también supone una nueva era para el sector de la automoción y los talleres, que traerá consigo cambios considerables y nuevos retos en el trabajo diario.

Vehículos eléctricos: un nuevo grupo de trabajo de la EGEA identifica algunas lagunas de información

Según el número de diciembre de su boletín de noticias EGEA inside, la Asociación Europea de Equipamiento de Talleres (EGEA) se ha fijado como objetivo apoyar al sector de la automoción y a los talleres en este cambio y hacer que estén preparados para el futuro. Para ello, se ha creado un nuevo grupo de trabajo con el objetivo de identificar las lagunas de información en materia de equipamiento, formación y oferta educativa y comunicarlas a la Comisión Europea.

 

La EGEA ya ha identificado algunos de los problemas más urgentes: servicios remotos, trabajos en sistemas de alta tensión y manipulación segura de baterías de litio. «Uno de los problemas más importantes es que la nueva generación de vehículos eléctricos realiza muchas más actualizaciones y diagnósticos a través de Internet, pero la legislación de la UE sobre acceso remoto aún está pendiente y algunos de los nuevos fabricantes de vehículos siguen bloqueando el mercado posventa», señala la publicación de la EGEA. Además, la asociación considera que los empleados de los talleres no siempre están protegidos de forma adecuada al realizar trabajos con alta tensión o cuando manipulan baterías de litio muy inflamables debido a la falta de información o de especificaciones. Como ejemplos se citan las plataformas elevadoras y los equipos para la extracción segura de las baterías de los bajos de los vehículos eléctricos. Además, los talleres de neumáticos también necesitan información correcta sobre los puntos de contacto para que la batería no resulte dañada al levantar el vehículo y pueda incendiarse.

 

Aquí encontrará el número de diciembre del boletín de noticias EGEA inside completo.