Un LED es un diodo emisor de luz y semiconductor que produce luz, rayos infrarrojos o rayos ultravioleta cuando la corriente atraviesa dicho diodo. Por ello, el material semiconductor utilizado es decisivo para la longitud de onda. Básicamente, un LED se compone de ánodo, cátodo, cristal semiconductor, alambre de unión y carcasa. En la mayoría de los diodos luminosos, el cátodo es también el reflector. El circuito integrado une el cristal con el diodo. La zona soldada forma una de las dos conexiones eléctricas del cristal. Al mismo tiempo absorbe el calor que surge, ya que solo una parte de la potencia eléctrica puede transformarse en luz a través del cristal semiconductor.
Dependiendo de la temperatura, los LEDs se accionan en un punto de servicio que debe determinarse y ajustarse con precisión.
Los LEDs no se pueden accionar de manera directa en una fuente de tensión sin resistor. Hoy en día, los LEDs se emplean en numerosos campos: en la pantalla de los smartphones, en los televisores LED, en la iluminación de espacios o incluso en el moderno equipamiento de quirófanos; ya no podemos imaginarnos nuestro día a día sin estos pequeños diodos luminosos.
Esto también se aplica al ámbito de la iluminación de los automóviles. Además de utilizarlos en faros principales, de largo alcance, auxiliares, en la luz de conducción diurna o en pilotos traseros (combinados), los LEDs también se encuentran en los pilotos de balizamiento lateral y de señalización. Con todo ello se cubre un amplio espectro de aplicaciones que no solo abarca la clásica iluminación de los turismos, como los conductores la conocen, sino también numerosas aplicaciones especiales para camiones, remolques, vehículos agrícolas y vehículos de emergencias y autoridades, por nombrar solo algunos.
HELLA es, desde el primer momento, una de las empresas pioneras y líderes en innovación en el desarrollo y en la producción de productos de iluminación LED para el automóvil. Encontrará miles de nuestros productos LED diariamente en las calles, ya sea en luces de conducción diurna y faros de turismos, en rotativos de vehículos de emergencias y autoridades, o en faros de trabajo de vehículos agrícolas.
Seguro que alguna vez conduciendo se ha cruzado con algún vehículo con la luz de cruce o de situación averiada (por lo general, la de un solo lado). Probablemente, incluso le ha pasado en su propio vehículo.
Esto suele deberse a que fallan las fuentes lumínicas de la iluminación convencional del vehículo y, cuando esto sucede, deben sustituirse lo antes posible. En las tiendas de accesorios pueden adquirirse las correspondientes lámparas incandescentes, como por ejemplo, fuentes lumínicas de alta calidad como las de HELLA.
Pero, ¿pueden producirse estas averías también en los LED? La buena noticia es que, por lo general, no. Los LEDs ofrecen una larga vida útil que, a menudo, es igual que la del vehículo. Ésta es una de las grandes ventajas de los LEDs frente a una fuente lumínica convencional como la lámpara halógena. Esta última fuente lumínica puede fallar en el transcurso de la vida del vehículo y, como se ha descrito anteriormente, deberá comprarse una nueva y sustituirse, mientras que los LEDs no necesitan ningún mantenimiento. Además de ofrecer un bajo consumo de energía, es decir, una elevada eficiencia energética, los LEDs proporcionan a medio plazo un claro ahorro en los gastos gracias a su larga vida útil.
Pero, ¿cuánto duran realmente los LEDs? No es posible dar una respuesta generalizada a esta pregunta, ya que aquí intervienen muchos factores que ejercen una influencia decisiva en este aspecto, como por ejemplo, la calidad de los LEDs utilizados, la frecuencia de encendido y apagado, el termocontrol empleado y muchas otras características. A modo orientativo podría decirse que un LED puede tener una vida útil de más de 30.000 horas. En comparación, las lámparas halógenas convencionales de 12 V suelen alcanzar 2.000-4.000 horas y no más.
No obstante, las influencias meteorológicas afectan incluso a los mejores LEDs. Si las circunstancias son muy desfavorables, los LEDs de un faro también pueden fallar. De momento es un elemento que no puede sustituirse. Si ocurriera un fallo, no habría más remedio que sustituir el faro entero. No obstante, esto es algo que sucede con muy poca frecuencia, al menos con los faros HELLA.
Sí, así es. Además de la larga vida útil ya mencionada, la alta eficiencia energética es una de las grandes ventajas que ofrece la tecnología LED. Los LEDs son, por así decirlo, los deportistas de élite entre las fuentes lumínicas: Su consumo de energía es muy bajo, aunque ello no les impide lograr el máximo rendimiento, por lo que son siempre una apuesta ganadora.
Un bajo consumo de corriente ahorra energía y, por tanto, reduce los gastos. Aunque, por el momento, los LEDs cuestan algo más a la hora de adquirirlos, su compra siempre resulta rentable a medio plazo gracias a sus bajos costes durante el servicio. El bajo consumo de potencia de los LEDs tiene, además, un efecto secundario que no debe subestimarse: Aprovechan bien los recursos energéticos de su vehículo, lo que repercute positivamente en la vida útil de la batería y, por si fuera poco, en el medio ambiente, ya que las emisiones de CO2 disminuyen.
La eficiencia energética en la iluminación de un vehículo es, hoy en día, algo crucial, y en el futuro llegará a ser un factor aún más determinante. Se prevé que el número de vehículos eléctricos aumente considerablemente en los próximos años. Con ello se cuidarán más los recursos energéticos utilizados en el automóvil, algo que se considera cada vez de mayor importancia. Por ello, el empleo de la eficiente tecnología LED en este sector es algo indispensable.
Seguro que alguna vez le ha ocurrido a Vd. también: A la hora de sustituir la lámpara incandescente o halógena hemos tocado la lámpara, que hasta hace poco estaba en funcionamiento, y nos hemos quemado los dedos. Ello se debe a la gran cantidad de calor que se produce cuando la lámpara está encendida. No solo nos quemamos los dedos, sino que esta circunstancia también conlleva una mala eficiencia energética, ya que el calor que no se aproveche significa energía perdida.
Pero, ¿qué sucede cuando usamos LEDs? ¿También se calientan? La respuesta sería "Sí y No", con una clara tendencia hacia el "No". Está claro que los LEDs también desarrollan cierta cantidad de calor durante su funcionamiento. Sin embargo, dicho calor es notablemente inferior al que desarrolla una lámpara incandescente en similares circunstancias. Los LEDs ofrecen una gran eficiencia energética. A diferencia de las fuentes lumínicas convencionales convierten en luz una gran parte de la energía suministrada. Por ejemplo: Una lámpara incandescente de 60 W ofrece una potencia lumínica de 600 lumen. Sin embargo, una lámpara LED actual que ofrezca la misma potencia lumínica solo consume 8 W.
Los faros LED también emiten muy poca luz UV o infrarroja. Gracias a ello y a diferencia de los faros halógenos estándar, no se calientan en la zona de salida de la luz. No obstante, un faro LED puede desarrollar calor en su carcasa. Aunque, en tal caso, el calor se debe a la electrónica que se ha empleado en el faro. Sin dicha electrónica no sería posible lograr un resultado lumínico óptimo.
Por ello, es importante poder contar con un buen termocontrol, como el que llevan los faros HELLA, ya que el calor creado por la electrónica debe poder disiparse de manera fiable y correcta. Gracias a un óptimo termocontrol, los faros no solo pueden ofrecer con todas las garantías un funcionamiento impecable, sino que su vida útil también se alarga notablemente y a menudo duran más que el propio vehículo.
Por todos estos motivos puede Vd. confiar en los faros LED de HELLA, ya que ofrecen numerosas ventajas. Ahora bien, ¡sobre ellos no podrá freír ningún huevo!
Con los LEDs pueden conseguirse distintos colores de la luz. Con "color de la luz" no nos referimos en este caso a una iluminación de color que se consigue con LEDs rojos, verdes o azules, sino a la "impresión" real creada por la luz y generada mediante LEDs blancos.
El color de la luz también se llama temperatura del color y su unidad de medida es el kelvin. Básicamente podemos diferenciar entre tres zonas de percepción del color: Blanco cálido (menos de 3.300 kelvin de temperatura del color), blanco neutro (entre 3.300 y 5.000 kelvin de temperatura del color) y blanco de luz natural (más de 5.000 kelvin de temperatura del color).
Con los LEDs puede cubrirse este amplio abanico que abarca desde el blanco cálido hasta el blanco de luz natural. En el sector de la iluminación del vehículo resulta de gran importancia aquel color de la luz que es muy similar al color de la luz natural del día. Se ha demostrado que el color de la luz contribuye a crear una mejor iluminación para poder detectar más claramente los objetos o los obstáculos que pueda haber en la carretera. Además, si la luz es similar a la luz natural del día, se reduce el cansancio que sufre el conductor al circular en la oscuridad, con lo que aumenta notablemente la seguridad en el tráfico y representa, al mismo tiempo, una ventaja no solo para el propio conductor sino para todos los usuarios de la carretera.
Los LEDs que se utilizan en los potentes faros LED de HELLA se someten a una serie de estrictas pruebas de calidad, tanto en lo relativo a su color de la luz como en lo relativo a su luminosidad. Estos dos parámetros están determinados por un estrecho margen de tolerancia. Gracias a ello, todos los productos pueden ofrecer una homogénea y elevada calidad lumínica en cuanto a su luminosidad, su color de la luz y otros factores importantes.
La percepción del color es algo personal, independientemente del valor kelvin medido realmente, y es, por tanto, una sensación subjetiva que puede variar de una persona a otra. Por lo tanto, el color es una impresión general de los sentidos y, sin la ayuda de medios técnicos, el ser humano no es capaz de saber cuál es la composición de la luz. Por este motivo, es prácticamente imposible comprender cómo perciben los colores los demás seres humanos en comparación con uno mismo e incluso, para una misma persona, la percepción del color cambia dependiendo de las fluctuaciones diarias.
¡Para algunas personas, el mundo puede mostrarse de una manera mucho más colorida que para otras, y ello solamente dependerá de su propia percepción personal!
A esta pregunta sí que podemos dar una respuesta concreta: La tecnología LED es rentable para todos, también para los conductores de turismo. Ello se debe a las muchas ventajas que ofrece la tecnología LED: Una larga vida útil, no necesitan mantenimiento, una elevada eficiencia energética y un color de la luz muy similar a la luz natural del día.
A menudo, la vida útil de los LEDs es igual que la del vehículo y, además, prácticamente no necesitan mantenimiento. Gracias a ello, la tarea de tener que comprar y sustituir una lámpara incandescente es cosa del pasado, así como el hecho de que falle la iluminación del vehículo. La elevada eficiencia energética de los faros LED también redunda en una mayor reducción de los gastos, ya que su bajo consumo de corriente conlleva un menor consumo de combustible. ¡El medio ambiente también se beneficia de la consiguiente reducción en las emisiones de CO2!
Aunque, por el momento, los LEDs cuestan algo más a la hora de adquirirlos, su compra siempre resulta rentable a medio plazo gracias a todas las ventajas mencionadas.
El color de la luz de los faros LED, muy similar a la luz natural del día, permite que se se reconozcan mejor los objetos de la carretera, es mucho más agradable para los ojos y consigue retrasar la aparición del cansancio; todo ello contribuye a aumentar la seguridad.
Además de las mencionados "ventajas de peso", el aspecto del diseño también es un factor importante en la tecnología LED: Los faros y los pilotos traseros LED proporcionan al vehículo una imagen inconfundible. Esta característica ya se percibe cuando están apagados, pero llaman mucho más la atención cuando están encendidos. La imagen lumínica tan singular de los LEDs, junto con el mencionado color de la luz, tan similar a la luz natural del día, consiguen una estética muy especial.
¡Gracias a la iluminación LED, su vehículo destacará claramente del resto!